Avanzan las obras de rehabilitación del antiguo hospital de San Roque

Las reiteradas epidemias de peste que afectaron a la ciudad de Santiago a lo largo del siglo XVI dieron origen a la construcción de la capilla y el hospital de San Roque para poder acoger la numerosa avalancha de enfermos.

Se construyó por iniciativa del arzobispo Francisco Blanco quien, en 1577, decidió su fundación y edificación por “la gran necesidad que hay en este arzobispado de un hospital en el que se puedan curar y procurar remedio a los pobres enfermos de bubas y otros males contagiosos”. Así se cuenta en un estudio firmado por la profesora M. Carmen Folgar, ya fallecida.

Con esta dotación la ciudad pasó a disponer durante el Antiguo Régimen de un nuevo centro de atención médica que se sumaba al Hospital Real, fundado por los Reyes Católicos en 1491; ambos se complementaban con otros centros hospitalarios, creados en época medieval o a comienzos de la edad moderna, que “tenían un sentido y una orientación marcadamente religiosas y daban una preferencia clara a la atención de los transeúntes”.

Ahora, la Xunta acaba de iniciar los trabajos para reparar y restaurar la fachada del edificio que albergó ese antiguo sanatorio.

Se trata de unas actuaciones iniciadas en el ala sur del complejo arquitectónico que cuentan con un plazo de ejecución de nueve meses y que son posibles gracias a una inversión de cerca de 200.000 euros por parte del Gobierno autonómico. El principal objetivo de estas actuaciones promovidas por la Consellería de Cultura es acabar con los múltiples problemas de humedad. Para ello, se resolverán las deficiencias en los elementos de evacuación de las aguas pluviales que, debido a la falta de mantenimiento, están afectados por la presencia de vegetación.

Además, en las fachadas norte y este, en las que la ausencia de un sistema de evacuación está afectando al revestimiento, se instalarán nuevos elementos como canales y bajantes de cobre.

Los trabajos se completan con la reparación de las filtraciones absorbidas por capilaridad, un problema que actualmente está ocasionando manchas de humedad en el interior del inmueble y que está llegando a deteriorar los revestimientos de la parte inferior de la fachada, según recoge el proyecto.

Las actuaciones en marcha también incluyen la sustitución de los elementos metálicos, como rejas, barandillas o herrajes, que debido a la oxidación están provocando manchas en el granito y en el revestimiento del edificio.

Por último, se procederá a la limpieza en la carpintería, los revocos de las fachadas, en los parámetros verticales y en los pavimentos de piedra con el objetivo de sustituir los elementos que estén en mal estado y de eliminar la vegetación y las manchas de suciedad y humedad.

La capilla de San Roque y el hospital homónimo se iniciaron en el año 1517 para pedir por el fin de la peste que en ese año se propagaba por Galicia y se concluyó 70 años después. Del diseño del edificio se encargó Gaspar de Arce, maestro de obras de la Catedral de Santiago.

En el primer tercio del siglo XIX, como indican las inscripciones que se leen en el friso y sobre una de las columnas del claustro, el hospital sufrió una restauración completa y de la traza original renacentista solo conserva la portada. Durante un tiempo acogió a los seminaristas menores, que luego fueron a Belvís.

 

Fuente: El Correo Gallego