El arzobispo preside en la Catedral la Misa de Pentecostés en el Día de la Acción Católica y del Apostolado Seglar

  • Monseñor Barrio destaca el papel de los laicos en la Iglesia

El arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio, presidió hoy la Eucaristía de la Solemnidad de Pentecostés en la Catedral compostelana, una fecha en la que la Iglesia celebra también el día de la Acción Católica y del Apostolado Seglar. Precisamente a los laicos se dirigió especialmente el arzobispo, animándoles a revitalizar la fe y a vivirla coherentemente en la vida personal y en el entorno familiar, profesional y cívico. Monseñor Barrio señaló, en relación con la fiesta litúrgica del día que el Espíritu Santo otorga fortaleza para testimoniar la fe y difundir el Evangelio. La Iglesia, dijo, el arzobispo, ha de construirse desde el diálogo y la acogida.

Con la Solemnidad de Pentecostés se cierra el ciclo litúrgico de la Pascua. Esta fiesta recuerda el momento en que los apóstoles recibieron el don del Espíritu Santo. Pentecostés, según dijo hoy el arzobispo, hace referencia a la unidad y a la misión de la Iglesia, que ha de abrirse a la sociedad para hacer presente su mensaje de entrega, generosidad, perdón y sanación, así como su preferencia por los más débiles y necesitados. Una tarea en la que los laicos tienen un papel significativo que cumplir en este momento.