IV Lunes de Cuaresma

Via Crucis de María

Texto litúrgico

“Así dice el Señor: «Mirad: yo voy a crear un cielo nuevo y una tierra nueva: de lo pasado no habrá recuerdo ni vendrá pensamiento, sino que habrá gozo y alegría perpetua por lo que voy a crear” (Is 65, 17).

Imagen

Jesús despojado de sus vestidos, echados a suerte Monasterio de Carmelitas de Palencia).

Novena estación

María contempla cómo desnudan a su Hijo, cómo sortean la túnica sin costura, la que con toda probabilidad había confeccionado ella misma.

“Los soldados, después que crucificaron a Jesús, tomaron sus vestidos, con los que hicieron cuatro lotes, un lote para cada soldado, y la túnica. La túnica era sin costura, tejida de una pieza de arriba abajo. Por eso se dijeron: «No la rompamos; sino echemos a suertes a ver a quién le toca». Para que se cumpliera la Escritura: Se han repartido mis vestidos, han echado a suertes mi túnica (Jn 19, 23-24).”

Comentario

¿A quién no le gusta quedarse con las pertenencias de sus seres queridos? María no solo fue testigo del despojo despiadado del Hijo de sus entrañas, sino de la subasta de su ropa. En particular, el texto señala de su túnica. En este despojo contemplamos hasta donde comprometió a María su maternidad divina, hasta el extremo de revestirnos a todos los humanos con la túnica de nuestra naturaleza, asumida por Dios en el seno de la Nazarena.

Cuestión

¿Sientes tu identidad sagrada, y la del prójimo, por llevar la naturaleza humana del Hijo de María, el Nazareno? ¿Tratas tu cuerpo como algo sagrado?