Es Septiembre un mes mariano: santo y cumpleaños de la Virgen, la celebración de la fiesta litúrgica de la Virgen de los Dolores y varias romerías en su honor por la comunidad gallega: A Virxe da Barca, A Virxe dos Milagres, A Virxe de Guadalupe, etc.

Qué mejor manera, pues, que comenzar el mes poniéndonos bajo el amparo de nuestra Madre para que ella guíe nuestras labores pastorales y nuestra vida cristiana en este nuevo curso que comenzamos. Quisimos hacerlo en el Santuario de Pastoriza. Allí acudimos, en la tarde del 1 de Septiembre, 31 miembros de las comunidades de Brexo y de Cambre.

Don Manuel Blanco, párroco del lugar, nos acogió con mucho cariño. Junto a su comunidad celebramos la Eucaristía, cantada por todos. Al final, oramos y adoramos al Señor, Pan de la Vida.

En este día comenzaba el Tiempo de la Creación. Pedimos al Maestro y a María, Reina de la Creación, luz para nuestro entendimiento y nuestros corazones, para saber amar y cuidar la creación que el Padre nos regaló a todos.

Antes de regresar a nuestros hogares, después de haber compartido la mesa de la Palabra y la mesa de la Eucaristía, compartimos la mesa del alimento corporal. Compartir la mesa, comer el mismo alimento es compartir la vida entre los comensales. Comer juntos fortalece las relaciones, nos hace familia. Así, en un ambiente sencillo, alegre y familiar, compartimos vida y viandas. Los excedentes de comida los compartimos con los más necesitados. Para ello contactamos con Natalio, párroco en A Coruña, e hicimos entrega de la comida en su parroquia de los Franciscanos para que los voluntarios del proyecto BOANOITE la hiciesen llegar a nuestros hermanos sin hogar.

Una tarde preciosa en comuidad, de la mano de Jesús y de María.

Susana