El templo de San Martiño Sobrán ha reabierto sus puertas tras una significativa intervención de la Xunta de Galicia en colaboración con el Arzobispado. En el evento estuvo presente, además del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, el conselleiro de Cultura, José López, y el alcalde de Vilagarcía, Alberto Varela, entre otras personalidades, el párroco de Vilaxoán, Manuel Folgar, y el arzobispo emérito mons. Julián Barrio, quien fue el encargado de presidir la Eucaristía.
Las obras se centraron principalmente en la capilla lateral y en la sacristía. Se renovaron las cubiertas y se sustituyó la estructura debido a su mal estado, lo que causaba graves humedades y goteras. Se solucionaron problemas puntuales de humedades y filtraciones en el ábside y la nave. Y se reemplazaron las vidrieras de madera.
El templo de San Martiño de Sobrán, que data del siglo XII, tiene sus orígenes en un antiguo monasterio mencionado en documentos del siglo XI. Según los historiadores, Raimundo de Borgoña y Doña Urraca donaron el monasterio al de San Paio de Antealtares en Santiago. En el siglo XII, el conjunto arquitectónico se redujo a una iglesia, que ahora pertenece al Arzobispado de Santiago.