El Instituto Superior Compostelano de Ciencias Religiosas (ISCCR) acogió este jueves la presentación del libro “Madre María Antonia de Jesús. Autobiografía”, obra de la fundadora del Carmelo de Santiago de Compostela. En la presentación participó el carmelita Rafael Pascual Elías y María del Salvador González Raposo, redactora de la Positio para la declaración de Venerable de esta religiosa carmelita, conocida también como la “monxiña do Penedo”, María Antonia Pereira do Campo en el siglo. Con la presencia del obispo auxiliar, monseñor Francisco José Prieto Fernández, el acto fue moderado por el secretario del ISCCR, Antonio Gutiérrez.
En su intervención, fray Rafael Pascual indicó que en la autobiografía de Madre María Antonia de Jesús “está el espíritu de Santa Teresa” y definió el libro como “historia de un alma”, al modo de la obra autobiográfica de la propia Santa Teresa de Jesús o de las obras de Santa Teresita de Lisieux o Edith Stein, en religión Santa Teresa Benedicta de la Cruz.
Fray Rafael Pascual animó a la lectura del libro, porque es la mejor manera, dijo, de “encontrarse con el personaje, en su autobiografía”. Indicó que la fundadora del Carmelo de Santiago vivió una experiencia profunda de Dios y “la ha puesto por escrito”. Añadió, además, que a través de la autobiografía de Madre María Antonia de Jesús podemos entrever “la historia de España del siglo XVIII” y conocer la Galicia de ese siglo.
Pero sobre todo, comentó fray Rafael, es la historia de la fundación de un convento: el de Santiago, algo que el Señor había pedido a María Antonia. En las páginas, comentó, se reflejan las dificultades que la religiosa carmelita tuvo para fundar el Carmelo compostelano y la confianza que ella tuvo siempre en la providencia divina. En esta autobiografía, señaló fray Rafael, “encontramos todo lo que es el Carmelo Descalzo”, desde la vida en comunidad a la vida de oración y la relación entre las monjas y los frailes carmelitas. El libro recoge, también, el momento fuerte en que María Antonia Pereira do Campo y su esposo deciden, de común acuerdo, consagrarse a la vida religiosa, siempre bajo el amparo y la protección de la figura de San José.
Por su parte, María del Salvador González Raposo destacó en su intervención la experiencia mística de Madre María Antonia de Jesús y describió la vida religiosa que se describe en el libro como “una historia de amor místico entre una mujer gallega y el Hijo de Dios vivo”. La redactora de la Positio explicó que la fundadora del Carmelo compostelano “vivió todas las Moradas” descritas por Santa Teresa y aseguró que el tálamo de sus desposorios “fue la cruz” y las arras, el encargo de la fundación del convento santiagués.
María del Salvador González Raposo aseguró que hubo “en ella un celo apostólico y misionero” y que llegó al “centro de la humildad”, siendo fiel a todos los mandatos del Señor, entre ellos aquel en el que le pedía que escribiese su vida.
Hay que señalar, como dato anecdótico, pero lleno de simbolismo, que en la mesa presidencial figuraba uno de los tomos manuscritos en los que Madre María Antonia de Jesús escribió su autobiografía, así como la pluma y el tintero con que fueron redactados.
