- La iniciativa persigue el alojamiento y acompañamiento para las personas que salen de la cárcel
El delegado episcopal de Cáritas Diocesana de Santiago de Compostela, Jesús García Vázquez, presidió lo actos de inauguración de un nuevo piso para atender a reclusos y ex reclusos sin recursos económicos para que en estas dependencias puedan pasar períodos de libertad condicional o permisos. El funcionamiento de la vivienda será gestionado por Cáritas Interparroquial de A Coruña, y se trata de la tercera oferta de estas características puesta en marcha por la institución. La primera vivienda para permisos penitenciarios se abrió en el año 2012
Tanto el director diocesano, José Anuncio Mouriño Rañó, como la directora de la Interparroquial, Pilar Farjas Abadía, recordaron que la iniciativa persigue facilitar el alojamiento y acompañamiento para que las personas reclusas que carezcan de residencia y medios económicos puedan disfrutar de la libertad condicional sin verse obligados a cumplir la totalidad de la condena en el centro penitenciario por carecer de familia u hogar al que poder volver.
Se trata del tercero de los pisos que Cáritas pone a disposición del colectivo de reclusos en la ciudad de A Coruña, donde ya existía otro para permisos penitenciarios y una casa de acogida para ex reclusos, con un servicio de acompañamiento y apoyo a la inserción, compuesto por profesionales y voluntarios.
A lo largo del año pasado y en lo que llevamos de 2019, Cáritas ha acogido en su vivienda a personas que han disfrutado de 113 permisos penitenciarios, estando ocupada todo el año, a excepción de la segunda quincena de agosto. Por otra parte, la casa de acogida para la reinserción contó con dos ex reclusos, uno de los cuales logró normalizar su vida.
Programa
El programa de acogida y atención a los reclusos puesto en marcha por Cáritas Diocesana persigue dar cobijo de manera temporal a los que salen de prisión; cubrir, dentro de las posibilidades, sus necesidades básicas, sobre todo las afectivas, pensando siempre en la salida de prisión, “que todos desean pero que les presenta muchas inquietudes”, señalan integrantes del programa diocesano. En todo el proceso juega un papel fundamental y de gran importancia el trabajo que desarrolla el equipo de voluntarios