El Camino de Santiago reivindica las «raíces de Europa» ante el Año Santo

  • Segundo Pérez López afirma que peregrinar adquiere hoy «un sentido nuevo»

«La peregrinación al Sepulcro del Apóstol está adquiriendo un sentido nuevo». Lo dice el deán de la catedral compostelana, Segundo Leonardo Pérez López. El teólogo al que ni su empeño en volver a situar el Camino de Santiago en el centro de la cultura europea, ni su proyección como investigador de la documentación histórica vaticana, le han impedido encontrar cada semana el tiempo necesario para ir a celebrar misa a su parroquia natal, San Pedro do Buriz, en la comarca de A Terra Chá.

El próximo 31 de diciembre se abrirá, oficialmente, el nuevo Año Santo. Un Año Santo que en principio debería finalizar el 31 de diciembre del 2021, pero que quizás pudiera prolongarse, ¿quién sabe?, hasta el Día del Apóstol del 2022. Pudiera ser, incluso (son muchos los obispos españoles que confían en ello, aunque en la catedral compostelana nadie se atreve a hacer cábalas al respecto), que el Papa Francisco visitase Santiago durante el Año Xacobeo, uniéndose por un día a la peregrinación a Compostela.

Pero, más allá de todo ello, lo cierto es que, mientras el Camino de Santiago -los Caminos de Santiago- vuelve a llenarse de caminantes, el renacer de la peregrinación, como subraya el deán Pérez López, irradia (incluso en estos tiempos del coronavirus, tan llenos de incertidumbre) una luz completamente nueva. Porque el Camino, explica Pérez López, se está reencontrando con sus verdaderas raíces, que son las «raíces cristianas de Europa». Y en estas circunstancias, que a su vez tienen una claro reflejo -subraya- en la profunda espiritualidad de quienes, desde todos los rincones del mundo, ya se están poniendo en marcha de nuevo para peregrinar a Compostela, es necesario, dice el deán, que la Iglesia, «como el Papa nos pide», se ponga claramente del lado de los pobres. De los pobres, y también de todos cuantos sufren, para dar respuesta al dolor de «la humanidad».

Frente al pesimismo

Europa está sufriendo, dice Pérez López, una «crisis de identidad». Y, en estos tiempos de coronavirus, tiene «miedo». Lo tiene Europa, dice el deán, y lo tiene, añade, el mundo entero. ¿Y qué es lo que le pide el deán al Apóstol? «Yo al Apóstol le pido -dice Pérez López- que nos muestre el camino para superar todo este pesimismo que, en medio de tanto dolor, nos ha invadido».

Isidoro Hornillos: «La peregrinación nos enseña que podemos ser felices ligeros de equipaje»

«La peregrinación nos enseña que podemos ser felices ligeros de equipaje», dice el profesor universitario y exatleta olímpico Isidoro Hornillos, firme defensor del patrimonio cultural y espiritual de los Caminos de Santiago. «Europa mantendrá sus señas de identidad mientras el Camino exista», añade Hornillos, que recalca la importancia de «superar obstáculos» y de «proyectar nuestra solidaridad».

XOAN A. SOLER

La incógnita de los peregrinos que vendrán en el 2021

Nadie puede saber, como señala Segundo Leonardo Pérez López, cuántos peregrinos llegarán a Santiago durante el Año Santo. «Todo va a depender -dice el deán- de cómo evolucione la pandemia». Pero de lo que a él no le cabe duda es de que, frente a la desesperanza, el «viaje al Sepulcro del Apóstol» volverá a ser, de nuevo, como lo fue durante siglos, uno de los «grandes pilares de la identidad europea».

En el 2019, y de acuerdo con los datos de la Oficina del Peregrino, Santiago de Compostela recibió un total de 347.578 peregrinos. Y aunque la mayor parte de estos caminantes viajan a través del Camino Francés, no está de más recordar que otros caminos, como el Inglés, ya superaron ampliamente el pasado año la cifra de los 15.000 peregrinos, y que las personas que marcharon hacia Santiago a través de la Vía de la Plata ya fueron, en el año 2019, más de 9.000.

Enrique Lista: «Santiago amósase hoxe como unha realidade única no mundo»

«Penso que o Camiño, no entorno da pandemia -dice Enrique Lista, el Padre Lista-, vaise ver enriquecido na súa dimensión reflexiva, humanizadora, solidaria e fortalecedora de valores que, cando non os hai ou son febles, deixan á persoa en desacougo e angustia». Al Año Santo 2021 él le pide, sobre todo, que sea eso: santo. Y advierte, además, que «debilitar a identidade orixinaria do Camiño é a maneira de trivializar a súa razón de ser e de deixalo sen ánima e sen misterio».

En opinión del Padre Lista, «para Europa e o Camiño», el Año Santo 2021 ha de ser, ante todo, «unha oportunidade de remediar a hemiplexía que padece», porque «medrou no material, pero está moi feble en humanismo e espiritualidade».

Sostiene Enrique Lista que «todo peregrino descobre, ou cando menos sente, que a súa peregrinación, sen a dimensión espiritual, quédase nunha especie de máster en sendeirismo, pero sen repercusión no seu ser máis fondo». «Santiago amósase hoxe -dice, también, el Padre Lista, un franciscano firmemente comprometido con el fenómeno jacobeo- como unha realidade única en Europa e no mundo. É a expresión máis antiga, máis real, máis auténtica do sentimento de ser Europa. Ningunha outra realidade, loables todas, ten a consistencia do Camiño».

 

Fuente: La Voz de Galicia