“En esta noche santa tocamos la orla del nuevo vestido del Resucitado, sabiendo que también Él nos sostiene firmemente en nuestra fragilidad. Celebramos a Cristo, Luz simbolizada en el cirio pascual, que ilumina los rincones de la historia de nuestra vida personal para hacernos pasar de las tinieblas del pecado y de la muerte a la luz de la gracia y de la vida. El Resucitado nos llama a caminar en su Luz y trasmitirla en todos los ámbitos de la existencia con la palabra y el testimonio de las obras”. Así se expresaba el arzobispo, monseñor Julián Barrio, en su homilía de la Vigilia Pascual. En esa noche santa y gozosa en que celebramos al que vive para siempre, al Cristo resucitado, el arzobispo compostelano dijo que “esta Noche Santa ilumine con esperanza y paz todos los lugares de la tierra. Con nuestra oración hago llegar la felicitación pascual al Papa Francisco. Con la alegría que nos da Cristo resucitado, saludo con afecto pastoral a todos los diocesanos, a los hermanos de la Iglesias y Comunidades separadas, a los de las religiones no cristianas, y a todos los hombres de buena voluntad que peregrinan en nuestra Diócesis”.