Entrevista con Mons. Agrelo, arzobispo emérito de Tánger

Se da por hecho que la tradición navideña de los Nacimientos (representar el nacimiento de Jesucristo con figuras) tuvo su origen en la Edad Media. Por ello se le atribuye a San Francisco de Asís el primer Belén del que se tienen noticia, en 1223. En el compostelano convento de los Franciscanos reside el obispo emérito de Tánger, Mons. Santiago Agrelo. Este año fue invitado a presidir la ceremonia de la Entrega de la Luz de Belén en la Catedral. Además, la presente entrevista recoge alguna reflexión que ayuda a vivir la Navidad con su auténtico espíritu.

 

1.- Este año ha presidido la Ceremonia de la recepción y entrega de la Luz de Belén. ¿Qué le ha parecido y qué puede aprovecharse de un acto que se va consolidando en el tiempo de Adviento?

 

“Es una representación semejante a la que hacemos todos los años en la Vigilia Pascual” (…) Una imagen simbólica y emocionante de la transmisión de la fe”

 

2.- Dicen que buena parte del “imaginario” de la Navidad (Nacimientos, recreaciones, ambientación…) pudiera tener origen en la tradición franciscana…

“San Francisco representó un Belén viviente en Gubbio en una noche de Navidad. Supuso para él una experiencia religiosa muy intensa”.

 

3.- Levantar la mirada hacia Tierra Santa es casi inevitable en esta época del año. Allí se encuentra la Custodia Franciscana de los Santos Lugares. ¿Esto puede ayudar a vivir más pegados al Misterio de la Encarnación del Hijo de Dios?

“La Navidad es un buen momento para recordar a aquellas comunidades crisitanas (…) que viven tiempos muy difíciles”

 

4.- En Navidad se revive un “éxodo” muy particular: La Sagrada Familia buscando posada en Belén. También, María, José y Jesús huyendo hacia un nuevo hogar en Egipto. ¿Cómo no recordar los movimientos migratorios que vive el planeta en la actualidad?

“No soy capaz de pensar en los pobres y el los inmigrantes sin pensar en Jesús”.