El Arzobispado de Santiago de Compostela acaba de hacer efectivas sus aportaciones a las entidades de carácter social que trabajan en pro de los más vulnerables y desfavorecidos, una medida necesaria sobre todo ante la situación provocada por la pandemia del coronavirus y la crisis subsiguiente. De este modo, la Archidiócesis mantiene el esfuerzo económico de destinar a estos fines 150.000 euros que se distribuyen así: la Cocina Económica de Santiago 20.000 euros; la Cocina Económica de A Coruña 20.000 euros; Comedor franciscano, en Pontevedra 10.000 euros; Institución Benéfico Social Padre Rubinos, en A Coruña 10.000 euros; y Cáritas Diocesana 90.000 euros.
Esta última institución, Cáritas Diocesana, va a contar además con una aportación procedente de la asignación para fines sociales procedente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), con un valor de 106.000 euros.
Como se sabe, en los presupuestos diocesanos, la atención a las necesidades sociales y pastorales constituye una prioridad. Y para ello son necesarias las aportaciones de los fieles, que se pueden realizar a través de la parroquia o de la Administración diocesana en nº de cuenta: ES38 2080 3561 9330 4000 3487 de ABANCA, o en el portal www.donoamiiglesia.es tratando de aliviar las consecuencias generadas por la pandemia.