El Padre Piero Gheddo, sacerdote italiano del Pontificio Instituto de Misiones Extranjeras, misionero y periodista, fundó en 1986 la agencia AsiaNews, para acercar la vida de los cristianos asiáticos a los occidentales. Siempre le llamó la atención el atractivo que el cristianismo suscitaba en Corea, algo que él resumía en 5 motivos: Primero: introduce la igualdad de los seres humanos, hombre y mujer creados por Dios.
Segundo: católicos y protestantes participaron en el movimiento popular contra la dictadura castrense de 1961 á 1987, impulsando una revolución no violenta. Tercero: el cristianismo es la religión del Libro y de un Dios Personal, que vive como una familia unida; no es un mero sistema de sabiduría donde cada uno va por su lado. Cuarto: las familias envían a sus hijos a las escuelas cristianas, orgullosas de que los valores del Evangelio formen con éxito a los jóvenes.
Quinto: el cristianismo (el catolicismo en particular), es visto como muy adecuado para dar respuesta a los problemas de los tiempos modernos; y con la capacidad de ayudar al mundo en su rápida y correcta evolución. Además, los cristianos se vuelcan en ayudar a los pobres.
Estos días, el buceador sudafricano Rainer Schimpf fue engullido por una ballena; unos pocos segundos dentro del cetáceo, hasta ser escupido por éste. Inevitable resulta la comparación con Jonás, muy presente en cada Cuaresma por la conversión de Nínive y la suya propia. En Corea, las conversiones también son numerosas. Volver a nacer. Transformados. Libres. Con rumbo. Por la apertura a un milagro de la gracia.
Manuel Ángel Blanco
(Cope, 15 de marzo 2019)