El arzobispo de Santiago de Compostela, monseñor Julián Barrio, presidió ayer en el Pazo de Fonseca, la inauguración de la exposición “El Domund, al descubierto”, un acto que contó con la presencia del obispo
Julio Parrilla, responsable de la Diócesis de Riobamba, en Ecuador, de origen ourensano; del obispo auxiliar compostelano, Jesús Fernández Díaz; de la vicerrectora de Estudiantes de la USC, Dolores Álvarez; y del director nacional de Obras Misionales Pontificias, Anastasio Gil. Estuvo presente también, como invitado de excepción el misionero jesuita compostelano, Andrés Díaz de Rábago, de cien años de edad y con setenta años de presencia misionera en China. Asistieron igualmente delegados diocesanos de Misiones, entre ellos el de Santiago, David Álvarez.
La exposición es un espacio abierto a los ciudadanos para que conozcan, valoren y ayuden a los misioneros que entregan su vida en favor de los más pobres y desfavorecidos en los territorios de misión, anunciándoles el Evangelio. En la exposición, que estará abierta hasta el 11 de octubre, fecha en la que está prevista la lectura del Pregón del Domund en la catedral, a cargo de la cantante Luz Casal, se pueden contemplar diversos paneles explicativos sobre el origen y el presente del Domund, así como sobre la actividad cotidiana de los miles de misioneros españoles dispersos por el mundo (8.748 en activo y 2.273 regresados a España), de los que 356 son gallegos y de ellos, 118 de la Archidiócesis de Santiago de Compostela.
En la inauguración de la exposición, la vicerrectora de Estudiantes, Dolores Álvarez, expresó su agradecimiento a los organizadores de la exposición por contribuir con ella a la “visualización” del trabajo y compromiso de los misioneros. De ellos dijo que llevan un “mensaje de esperanza”. Por su parte, Anastasio Gil, responsable de Obras Misionales Pontificias, mostró su agradecimiento a la USC por la colaboración prestada en la exposición. Gil explicó que en la exposición se recogían, por ejemplo, todos los carteles del Domund desde el año 1941, y aludió al valor de los mensajes de los distintos papas a los misioneros, desde el año 1963. El responsable de las OMP recordó, además, el amplio abanico de actividades que se pondrán en marcha en los próximos días en las cinco diócesis gallegas.
A su vez, monseñor Julio Parrilla, obispo de Riobamba, aludió al nacimiento de su vocación misionera, evocando sus recuerdos de infancia en Ourense con la cuestación del Domund y aseguró que “todos tenemos que ser misioneros”. En su diócesis de Ecuador, explicó, “con lugares de hasta 4.000 metros de altitud”, el trabajo con los indígenas quichuas es el eje de la misión.
Al término del recorrido que los asistentes hicieron por la exposición, pronunció unas palabras el arzobispo compostelano, monseñor Julián Barrio, quien comentó que la “Iglesia educa evangelizando y evangeliza educando”. Monseñor Barrio afirmó que era “un gran honor” para toda la Iglesia en Galicia el acoger este año las celebraciones previas al Domund (el domingo 22 de octubre). “La misión nos compete a todos”, aseguró, tras reflexionar sobre la unidad entre los misioneros gallegos y sus diócesis de origen. Para monseñor Barrio, la tarea de los misioneros no atañe únicamente a la dimensión trascendente, sino a todo aquello que contribuye a un desarrollo integral del hombre, “sin herir el corazón de nadie”.
La exposición está organizada por OMP y coordinada por la Delegación Diocesana de Misiones de Santiago. En ella colaboran el resto de delegaciones diocesanas de las otras diócesis de Galicia. Está comisariada por Antonio Aunés y Rafael Santos. Al servicio de los visitantes estará el misionero Juan Antonio Fraile. El horario de visitas es de lunes a sábado de 11 a 14 horas, durante la mañana, y de 17 a 20 horas por la tarde. La exposición estará abierta en el Pazo de Fonseca hasta el día 11 de octubre.