El pasado domingo, después de la catequesis familiar en el templo y de celebrar con alegría la Eucaristía cantada, la parroquia de Cambre se unió espiritualmente a la Casa del Señor Santiago y también trasladó a San Roque desde su capilla hacia el altar mayor.
Vivimos tiempos recios, de enfermedad, muerte, sufrimiento, miedo, desilusión y desconcierto, pero no estamos solos. El Señor, aunque parece dormido, nos lleva en la palma de su mano como lo hizo con San Roque.
Hacia Roque, abogado de la peste, miramos y dirigimos nuestra oración para que interceda ante el Buen Dios y nos ayude a seguir caminando con fe, sin desfallecer, en esta crisis sanitaria, económica y social que vivimos.
Comenzaremos una novena en honor su honor este martes, día de la Presentación del Señor, y finalizará coincidiendo con la festividad de nuestra Señora de Lourdes y la Jornada Mundial del Enfermo.
SAN ROQUE GLORIOSO Y BENDITO, SANTO Y PEREGRINO, LÍBRANOS DE ESTA PESTE Y SUS MALES.