¡Qué importantes son las fiestas patronales en la vida de los pueblos! Son parte de su identidad. Son patrimonio social y cultural. Nos recuerdan nuestras raíces, dan sentido significativo a nuestro presente y nos proyectan a la esperanza futura.
Alegría emocionada en los rostros de todos los que el pasado domingo, 9 de Julio, se dieron cita a las 13’00 h., en la iglesia de San Cristóbal de Dormeá (Boimorto) para celebrar el día del Señor y honrar a su patrón.
Al finalizar la Eucaristía, tuvo lugar la procesión del santo y la bendición de los vehículos que se encontraban en los aledaños del templo.
La iglesia completó el aforo. El respeto, la devoción, la oración y cantos compartidos nos dan testimonio de la fe de esta sencilla comunidad parroquial que sabe bien que si encomienda su camino al Señor él actuará, cada día, para sanarles y salvarles.