Las Hermanas Catequistas de Jesús Crucificado, celebraron su 50 aniversario de aprobación pontificia y hacen partícipes de ello a toda la Iglesia diocesana de Santiago, para unirse a su acción de gracias.
Por este motivo, ayer viernes a las 20:00hs el arzobispo de Santiago de Compostela, mons. Francisco Prieto, presidió una Eucaristía de Acción de Gracias en la Parroquia de San Fernando.
Las Hermanas Catequistas de Jesús Crucificado es un instituto religioso de Derecho Pontificio desde 1974, y se dedican al trabajo evangelizador de la Iglesia, colaborando en las diferentes vertientes de la pastoral, como en secretariados diocesanos de catequesis o trabajos parroquiales acompañando en la formación de catequistas y agentes de pastoral en todos los niveles, grupos juveniles y vocacionales, familias, adolescente y otras necesidades pastorales.
Su Carisma es: “Ser testigos de Cristo Crucificado mediante la vida consagrada y la Evangelización y la Catequesis, por la fuerza del Espíritu para Gloria de Dios Padre”
Las HCJC tienen presencia en la Archidiócesis de Santiago de Compostela desde 2014, concretamente en la Delegación para la Catequesis y el catecumenado, donde comparten su Carisma catequético evangelizador, a través del acompañamiento a los catequistas de las diferentes parroquias, elaborando en equipo material para su formación, dando un empuje en la evangelización digital.
En la Parroquia de San Fernando tienen su residencia y ahí, una de las hermanas colabora en las actividades parroquiales. Actualmente, son tres hermanas que conforman la comunidad: María de Lourdes Hernández Nanguelü, Margarita Migdalia Cundapí Morales y María Magdalena Ramírez Llamas. Las tres de nacionalidad mexicana.