Con el ambón adornado con flores siempre vivas como símbolo de la Palabra que da Vida y Vida Eterna, con la entrega del Nuevo Testamento a niños y niñas de segundo de primaria de la catequesis y con un cuarto de hora, previo a la Eucaristía, en el que catequistas y catequizandos fueron proclamando textos de la Biblia e intercalando el canto “Tu Palabra me da Vida”, en la parroquia de Cambre celebramos con gozo este Domingo de la Palabra de Dios.

Gracias por transmitirnos la Palabra de Dios. Gracias por anunciarnos lo que habéis visto”, así rezaba una de las carillas del marcapáginas que niños y jóvenes de la catequesis parroquial de Cambre elaboraron y regalaron a los adultos de la comunidad. En la otra carilla del marcapáginas cada uno compartió una frase de Jesús de Nazaret.

Como los primeros discípulos, somos llamados a llevar a todos la luz de la Palabra. Ojalá  a nadie le falte el alimento de la Palabra.

Susana Doval