La Iglesia en 12 Semanas: Patrimonio

El patrimonio cultural de la Iglesia surge con una finalidad concreta: la transmisión de la fe a través de las enseñanzas catequéticas y de las celebraciones culturales. Y hoy, sigue anunciando y celebrando el Misterio de Cristo.

Por eso, la Iglesia conserva su patrimonio cultural y lo amplía con nuevas formas de expresión. En 2022, las diócesis españolas destinaron 47.244.310,75 euros a 499 proyectos de construcción, conservación y rehabilitación. Además, este mismo año se emprendieron 34 proyectos de construcción de templos y 465 proyectos de rehabilitación del patrimonio.

La Iglesia hoy sigue proponiendo el camino de la belleza como espacio privilegiado para el encuentro con Dios y con su Iglesia.

Descubrir la belleza de lo sagrado a través del arte es precisamente el objetivo de la Fundación Vía del Arte, que impulsan un grupo de artistas de distintas disciplinas entre los que se encuentran el escultor Javier Viver; el compositor y director de orquesta Ignacio Yepes; el arquitecto Benjamín Cano; o la pintora María Tarruella. El patrono de Honor de esta Fundación es el pintor y Premio Príncipe de Asturias de las Artes, Antonio López.

Además, el patrimonio cultural de la Iglesia también se adapta al mundo actual. Como el Palacio Episcopal de Segovia, antigua residencia de los obispos hasta 1969, que ha puesto en marcha una experiencia que fusiona historia, cultura y entretenimiento: el Escape Room “El otro lado del Palacio”. Este proyecto innovador, gestionado por el cabildo de la catedral de Segovia, ofrece una manera diferente de acercarse al patrimonio eclesiástico.

La misión evangelizadora de la Iglesia tiene una presencia secular en el arte: cuadros, retablos, imágenes y edificios han servido durante siglos para expresar la fe de la Iglesia y difundirla en las situaciones históricas más diversas.

También hoy, en medio de una sociedad que oculta a Dios o, sencillamente, lo desconoce, la Iglesia propone el camino de la belleza como espacio privilegiado para el encuentro con Dios y con su Iglesia.

Esa belleza, que se actualiza en cada momento histórico, se ha hecho cultura también a través de la literatura, el teatro o la música.

La importante presencia de la Iglesia en el amplio patrimonio cultural de nuestro país supone una fuente inmensa de riqueza y valor para toda la sociedad.

El patrimonio cultural tiene una finalidad litúrgica, evangelizadora y pastoralPero al mismo tiempo, está abierto al estudio y a la contemplación de la sociedad. Por eso la Iglesia lo pone a disposición de todos.

Conocer las raíces de nuestra civilización y los elementos que le han dado continuidad en el tiempo es una responsabilidad para los cristianos y su conservación lo es para toda la Iglesia.

El cuidado de cada comunidad cristiana por este patrimonio, que presenta una grandeza material e inmaterial, es expresión del cuidado de la Iglesia por la difusión de la fe en nuestro tiempo.