La Iglesia que Dios quiere. La Iglesia en Sínodo

Jesús que es Dios, en la tierra, fue una persona sencilla. El único requisito que existía era, que la persona necesitase ser sanado, y, se acercase a Él con confianza. La gente decía ¡Señor tú puedes! O Señor ¡Ten compasión de mí! También decía ¡Qué pueda ver/oír/andar! ¡Qué pueda dejar de sangrar!, incluso los más atrevidos pedían Señor ¡Resucita a mi…! Y Él, compasivo, sanaba por fuera y sanaba sobre todo por dentro, dejando, en cada persona que a Él acudía, la alegría que no se termina nunca, porque nace de dentro al caminar junto a Jesús.

El Papa, el pasado mes de octubre, ha propuesto un tema para caminar juntos. Caminar para recuperar aquella sencilla esperanza y alegría de cuando se podía ver y tocar a Jesús. Lo hace “en la senda de renovación de la Iglesia propuesta por el Concilio Vaticano II” Y se dirige, como lo hacía primero Jesús, y luego Pedro, a todas y cada una de las personas que escuchen el mensaje, sin más requisitos.

Para caminar felizmente juntos hace falta mucha gente y una senda muy grande, en la que todos puedan estar verdaderamente cerca, estando cerca puedan escuchar y ver qué sucede alrededor y viendo y escuchando se pueda estar disponible al prójimo no vaya a ser que haya distanciamientos no deseados.

Caminar juntos significa que tiene que haber más gente, que esa gente no puede ser igual. Un ejército no escucha, cada uno ha sido entrenado para hacer su misión y se obedece sin más. Porque no se escucha lo que ya se sabe y conoce, se escucha aquello que te llama y te motiva. Cuando en la vida de una persona hay un encuentro importante en el camino de la vida, en el recuerdo personal se atesora todo como cuando se guarda la secuencia de una película fotograma a fotograma.

¡A que no habías oído nunca esto! ¡¡!! ¿Qué el Papa de Roma quiere escucharte sobre que puede hacer a la Iglesia ser más como Dios quiere? ¿Y si ese encuentro con Jesús que te cambió la vida es aquel que hay que escuchar? ¿Te lo vas a guardar para ti?
Jesús quiso ser pequeño y mostrarse a los sencillos. No hace falta que ese encuentro sea espectacular, hay flores que nacen en un pedregal para que sólo las contemple el cielo, pero el cielo, que lo refleja todo, no es igual sin ellas.

Por eso escucha y avisa a todas las personas. ¡Hay un sínodo! y ¡se puede participar! Busca en internet sínodo 2021-2023 en la archidiócesis y encontrarás documentación y propuestas para participar.

Parafraseando un viejo slogan ¿Es este tu sínodo?¡Contamos contigo!

MAJOLU