Mons. Julián Barrio, Arzobispo de Santiago. Jornada de Personas sin Hogar.
Fernando García de Cortázar, jesuita e historiador. Centro Fonseca.
Juan Ventura, párroco. Homenaje al párroco de Vilanova de Arousa.
Anuncio Mouriño, director diocesano de Caritas. Jornada de Personas sin Hogar.
Severino Suárez Blanco, arcipreste de Riazor. Peregrinación a Pastoriza.
Momento Blanco en Cope: escrache a Dios
¿Imaginan hacerle un “escrache” a Dios? En esta época y en esta Europa, muchos desearían retar de este modo al Altísimo. Denunciarle como a un propietario abusivo en sus precios. No reparan en que la humanidad vive de prestado en la tierra. La renta por habitarla no existía hasta que, en el tiempo original, el ser humano descubrió el pecado y ahora ha de pagar, en cuerpo y alma, el importe de una deuda plúmbea que lastra.
Los intereses han aumentado porque las personas echan más leña al fuego de sus pasiones, vicios, problemas y egoísmos. Se acusa a Dios, incluso, de subir el “alquiler”: se necesita solidaridad, honradez, sinceridad, virtudes, valores… Hay gente que no quiere a Dios como “casero”; ni agradecer su misericordia; ni esforzarse por los demás. Nombre y apellidos de Dios. Domicilio. Aviso a los Medios de Comunicación y… ¡a por Él!
El caso “Franco.stein”, tan de actualidad, permite condenar la ideología y la actividad de un cadáver. Pero el Creador no se ajusta al perfil de un muerto ni al de un dictador. Él no “desahucia”. Y buena parte de la humanidad afirma que está vivo. Por eso muchos no protestarían nunca contra Dios. Sería darle importancia, reconocerle de algún modo. Rehabilitarlo. La altivez del ser humano prefiere no pensar ni concebir un corazón agradecido; le cuesta más pedir disculpas que “escrachar”.
Manuel Ángel Blanco
