El Archivo Histórico Diocesano edita el tomo III de su “Inventario de Fondos Parroquiales de la Provincia de A Coruña”

El Archivo Histórico Diocesano de Santiago (AHDS) acaba de editar el Tomo III de su “Inventario de Fondos Parroquiales de la Provincia de A Coruña”, una publicación que comprende los fondos de las parroquias cuyos nombres se encuentran entre las letras Q y Z. El responsable del AHDS, Salvador Domato Búa, agradece a cuantos han hecho posible este nuevo volumen su colaboración: “Agradezco, de entrada, a cuantos lo hacen posible, singularmente a la Diputación Provincial de A Coruña, mecenas generoso de la recogida en las parroquias de origen hasta el posterior tratamiento de los registros tras ser depositados en el archivo”. También reconoce la dedicación de los trabajadores del Archivo, “sin los cuales ningún trabajo es posible”.

El presidente de la institución provincial, Valentín González Formoso, afirma en la introducción que se trata de “un traballo de longo percorrido que, dous anos despois da publicación do último exemplar, constátase o valor dun legado arquivístico que se completa con este libro que achega aos cidadáns a orixe das súas parroquias, e o seu contexto cristián ata os nosos días”.

En la presentación del volumen, el arzobispo de Santiago, monseñor Julián Barrio, recuerda que “acaban con este tercer volumen del “Inventario de Fondos Parroquiales de la Provincia de A Coruña” los esfuerzos de varios años llevados a buen puerto por el equipo del AHDS en favor de un mejor conocimiento del pasado y de una más lograda proyección de nuestro futuro como comunidad”. El arzobispo expresa, también, su “gratitud para todo el personal del Archivo por su trabajo y la cordial felicitación por el resultado que ahora se presenta”.

La coordinación de la publicación corrió a cargo de Salvador Domato Búa, director del Archivo Histórico Diocesano de Santiago. El equipo redactor estuvo compuesto por Beatriz Cancelada Calviño, Urbano Santiago Cadaval, Víctor Manuel Camino Giadáns y Damián Porto Rico. Formaron parte del equipo colaborador: María José Presedo Arnaú y Rosa María Temperán Villaverde. El diseño correspondió a José Ignacio García Fernández.