La Casa Sacerdotal, cruce de caminos este verano para sacerdotes de todo el mundo

Durante el pasado mes de julio, la Casa Sacerdotal de Santiago de Compostela recibió la visita del sacerdote ugandés D. Samuel Okiria, de 41 años, quien ha compartido su fe, su alegría y su visión de la Iglesia durante una intensa experiencia pastoral en Galicia.

Con 12 años de ministerio a sus espaldas, D. Samuel se mostró entusiasta por esta oportunidad de misión en tierras compostelanas. Durante su estancia, colaboró en la atención pastoral de la Catedral —confesando tanto en español como en inglés— y celebró la Eucaristía en dos parroquias rurales los domingos. También prestó servicio en la comunidad de religiosas mercedarias.

En una entrevista realizada en la propia Casa Sacerdotal, el sacerdote destacó su impresión positiva de la ciudad y de sus gentes:
“Me parece que Santiago es un lugar muy espiritual, que refleja muy bien la unidad y, al mismo tiempo, la diversidad de la Iglesia católica”, expresó.
Sobre las comunidades rurales gallegas, afirmó con una sonrisa: “Su vida ordinaria me recuerda a la de mi país, Uganda. He visto gente amable, sencilla, acogedora y con buen humor”.

D. Samuel también valoró de forma muy especial su estancia en la Casa Sacerdotal:
“Ha sido una experiencia maravillosa. Aquí hay sacerdotes mayores que han servido muchos años al Señor. Su sabiduría y experiencia pastoral me han ayudado a vivir mejor mi propio sacerdocio”, comentó emocionado.

Antes de partir, elevó una petición al Apóstol Santiago: “Le pido salud de alma y cuerpo… y que me permita volver el próximo año”.

De regreso a Madrid, D. Samuel continuará sus estudios de filosofía, que compagina con su labor pastoral en la parroquia de la Fuensanta. Su objetivo a medio plazo es regresar a Uganda para impartir clases en el seminario nacional.

Otras visitas y noticias desde la Casa Sacerdotal

La Casa Sacerdotal ha seguido recibiendo visitantes en estos meses de verano. El 16 de julio llegó fray Nicodemo, dominico polaco, para atender a peregrinos de su país durante una semana. Días después, lo relevó el sacerdote secular Darío, también polaco, quien ha realizado ya seis veces el Camino de Santiago.

El director de la Casa, por su parte, realizó una peregrinación a Turquía del 18 al 29 de julio junto a un grupo de feligreses de Fontiñas y de los Tilos. A su regreso compartió con la comunidad una tertulia en la que relató con entusiasmo la experiencia de fraternidad vivida y las visitas a lugares emblemáticos como Estambul, Éfeso y Anatolia, donde incluso pudieron celebrar misa diaria.

Entre las visitas destacadas, también pasó por la Casa un capellán del Ejército del Aire, con motivo de una exhibición aérea en Lavacolla. Asimismo, el sacerdote jubilado D. Tomás Rivas, de Jaén, compartió unos días de descanso con sus compañeros.

Noticias del día a día

La vida cotidiana en la Casa también deja buenas noticias. D. Benjamín se encuentra recuperado, lo que ha llenado de alegría a la comunidad. D. Ricardo Bello celebró su 99 cumpleaños el 1 de agosto —¡felicidades!—, y D. Manuel Silva, a pesar de sus dificultades para caminar, pudo asistir a la toma de posesión del nuevo deán de la Catedral. Además, sigue regalando belleza al jardín de la Casa, que cuida cada tarde con esmero.

Una vez más, la Casa Sacerdotal de Santiago se convierte en un espacio de encuentro, fraternidad y servicio, reflejo de la vitalidad de una Iglesia que no descansa ni en verano.