Comunicado del Arzobispado de Santiago de Compostela

Ante las informaciones difundidas en algunos medios de comunicación, el Arzobispado de Santiago de Compostela se ve en la obligación de realizar las siguientes consideraciones:

1.- El sacerdote de Caamaño, D. Carlos Julio Cárdenas Torres, ha visto impedida su actuación en dicha parroquia en este momento. El último ejemplo de ello ha sido la colocación de sendas cadenas con candados en las dos puertas del templo.

2.- Tras denunciar estos hechos, para que se proceda a su investigación policial, y a la espera de conocer a quién corresponde la responsabilidad de este y de otros comportamientos violentos, el Arzobispado confía en recuperar un clima de serenidad en la parroquia, contando para ello con la implicación de los feligreses interesados en normalizar la situación.

3.- La Vicaría Territorial de Santiago dio respuesta en su día a las supuestas quejas presentadas por un grupo reducido de vecinos.

4.- El Arzobispado invita a todos a reflexionar sobre la necesidad de restaurar un verdadero clima de comunión eclesial, respetando las funciones y competencias de cada uno y sin excluir a nadie. El diálogo será el instrumento para conseguirlo.

5.- El Arzobispado reclama también que las redes sociales no se conviertan en escenario de desencuentro o descalificaciones personales.